Como la mejor manera de que se entienda algo que puede ser complicado es poner ejemplos, a continuación expongo unos cuantos para que se comprendan los conceptos rápida y fácilmente:
Original en inglés: It looked so real.
Mala traducción: *Parecía tan real.
Buena traducción: Parecía tan real…
Posible significado completo: Parecía tan real que daba miedo.
Mejor traducción: Parecía muy real.
Original en inglés: I am so happy!
Mala traducción: *¡Estoy tan contento!
Buena traducción: ¡Estoy tan contento…!
Posible significado completo: ¡Estoy tan contento que no me lo creo!
Mejor traducción: ¡Estoy muy contento!
Sencillamente, la frase *Parecía tan real no tiene sentido porque está incompleta, le falta el significado que le confieren los puntos suspensivos (indicar que está inacabada, en suspensión) o, alternativamente, el adverbio muy. Lo mismo ocurre con todas las del mismo tipo. Como puede observarse, con el simplísimo acto de colocar puntos suspensivos una expresión incompleta e inadecuada puede convertirse en correcta automáticamente. En la mayoría de estos casos, el adverbio muy también funciona perfectamente, aunque está a discreción del traductor —dependiendo siempre del contexto y la intención— escoger los puntos suspensivos o muy.
Ups, pues mucha gente dice «estoy tan contento» sin estar traduciéndolo del inglés…
Amiga Eva, no debes confundir conceptos ni contextos.
En este artículo hablo de la traducción de expresiones en inglés con el adverbio tan. No digo nada de expresiones en español que naturalmente contienen este adverbio.
En ningún momento digo que tan sea siempre una traducción. Este vocablo existe en la lengua castellana desde siempre, o al menos desde hace muchos siglos.
Lo que intento explicar aquí es que debemos tener cuidado cuando traducimos expresiones. Debemos dar la expresividad adecuada mediante el uso correcto de los signos de puntuación y el resto de elementos de la lengua escrita.
Por favor, lee atentamente.
Saludos cordiales.